viernes, 22 de mayo de 2015

EGIPTO

BAJAR  TEXTO Y PEGAR

                                               EGIPTO


Período predinástico

En esta época se inicia la división del valle del Nilo en dos zonas: la del delta o Bajo Egipto, y la parte septentrional del valle o Alto Egipto. Se reconocen aquí la presencia de culturas que vivían de la caza, la pesca, la ganadería y el cultivo incipiente de cereales. En la transición hacia el uso de los primeros metales se muestra un avance en las técnicas de elaboración de cerámica y en la fabricación de vasos de piedra, y el empleo de objetos de cobre forjado.

La cultura de Gerze, desarrollada hacia el año 3500 a. C., ocupó las técnicas metalúrgicas y la decoración de la cerámica. Hacia el 3300 a. C., la cultura nagadiense representó el tránsito hacia la época histórica.

2.-Imperio Antiguo (3100-2160 a. C.)

A finales del cuarto milenio a. C., el rey Menes, procedente del Alto Egipto, unió a todo el país y fundó la primera dinastía. Desde entonces los faraones ostentarían el poder del Alto y Bajo Egipto.

En esta época se crearon y consolidaron las características específicas de la civilización egipcia, tales como la organización política, la escritura, la arquitectura y el arte, entre otras manifestaciones culturales.

Las primeras dos dinastías se denominaron tinitas, por tener su capital en Tinis, período en el cual se produjo un aumento en la prosperidad económica del pueblo egipcio. Con la III dinastía, iniciada hacia el 2686 a. C., la capital se trasladó a Menfis y los faraones iniciaron la construcción de las pirámides, que sustituyeron a las mastabas (construcciones en forma de pirámide truncada) como tumbas reales. En esta dinastía destacó el faraón Zoser, quien tuvo como consejero a un sabio llamado Imhotep, el primer científico conocido de la historia, que alcanzó renombre como médico, pensador y, en especial, como arquitecto al construir la pirámide de Saqara.

Los faraones siguientes también quisieron tener sus propias pirámides, sobre todo durante el período de la IV dinastía (2613 a.C.), iniciada por Snefru y reconocida como la época de mayor esplendor de la civilización egipcia. En este período se produjo la expansión territorial al sur de la segunda catarata, se realizaron expediciones a Nubia y Libia, se impulsó el comercio marítimo en el Mediterráneo oriental; se inició la explotación de las minas de cobre del Sinaí y de las canteras de Asuán y del desierto nubio.

Snefru emprendió la construcción de la primera pirámide auténtica, sin escalones. A su sucesor, Keops, se debe la construcción de la mayor de las pirámides en Gizeh. Kefrén, hijo de Keops, construyó otra más pequeña. La tercera de las grandes pirámides fue levantada por Micerinos. Pero este auge arquitectónico comenzó a decaer bajo las dinastías V y VI. En la V, iniciada hacia el 2494 a. C., se produjeron modificaciones en el modo de gobernar, como consecuencia de la influencia del clero de la ciudad de Heliópolis, que impuso la supremacía del culto al dios Sol.

3.-Imperio Medio (2040-1786 a. C.)

Los faraones de la XII dinastía consiguieron terminar con el poder de los gobernadores gracias al apoyo de los sacerdotes de Amón. Entre los años 1786 y 1567 a. C. se produjo una nueva desintegración del estado, que favoreció la invasión del pueblo asiático de los hicsos, quienes utilizaron caballos y carros de guerra -desconocidos por los egipcios- para imponer su poder.

Los faraones de la XVII dinastía de Tebas lograron vencer a los hicsos y los expulsan.

4.-Imperio Nuevo (1567-1085 a. C.)

Amenofis I,  Tutmosis I ¸ Tutmosis III extendieron las fronteras  hasta el río Éufrates e iniciaron una nueva época de esplendor.

Los reinados de Amenofis II y Amenofis III mantuvieron el esplendor del imperio nuevo. Amenofis IV impulsó una reforma religiosa monoteísta centrada en el culto al disco solar Atón, cambió su nombre por el de Akhenatón, y trasladó la capital a Aketatón. Tutankamón, yerno de Amenofis IV, restableció los antiguos cultos, pero murió prematuramente y el general Horemheb se proclamó faraón, reorganizó el estado y combatió a los hititas.

Con Ramsés II, la ciudad de Tebas alcanzó una gran prosperidad. Se llegó a un acuerdo con los hititas tras la batalla de Qadesh y se restauró el esplendor de Tutmosis III. El último faraón poderoso de la XIX dinastía fue Menefta, quien se enfrentó exitosamente con los pueblos del mar.

Ramsés III, de la XX dinastía, rechazó a los invasores y consiguió algunos años de paz.

 Después de la muerte de su esposo, en 1504 a. C, Hatshepsut se convirtió en regente de su joven hijastro y sobrino, Tutmosis III. Una vez instalada en el trono, Hatshepsut asumió las funciones, los distintivos e incluso las vestiduras de un faraón, y gobernó durante casi veinte años.

Uno de los más notables acontecimientos del pacífico reinado de Hatshepsut fue una expedición naval a tierras somalíes, de la que volvieron con mirra e incienso, y también con marfil, ébano, pieles de pantera y oro, la exótica mercancía del interior de África. La expedición se conmemoró con relieves en el templo funerario de Hatshepsut en Tebas.

5.-Decadencia del imperio

Caen bajo la dominación de los persas.   

Ra, Anubis, Amon ,Apis, Hathor, Bes, Horus, Isis, Kheper, Maat,Neftis, Nut, Osiris,Ptah, Seth, Thot, Aman.

Cuerpos de personas y cabeza de animal

Aportes: El libro de los muertos, las pirámides, las mastabas, el calendario  de 365 días de 12 meses y 5 festivos, las técnicas de embalsamar, el sistema de escritura, el papiro,  las columnas, operaciones, conceptos de geometría, las pinturas.

 

jueves, 14 de mayo de 2015

ME GUSTA APRENDER

  Hola lee el texto que encuentras a continuacion y desarrolla la actividad que aparece al final, hasta en nuna hoja y llevala a la clase.
Me gusta aprender
El ser humano ha recibido elementos suficientes que le permiten ser inteligente. Tiene la tarea continua de aprender inteligencia como lo dice el libro de los Proverbios, tarea para toda la vida. Ser inteligente es una realidad en el ser humano y una oportunidad maravillosa de alzarse por encima de lo visible hacia lo invisible.
Desde que el ser humano es niño, demuestra el poder de su mente, de su imaginación y de su creatividad gracias a los sentidos internos que se desarrollan lentamente en el cerebro. Escudriña espontáneamente los espacios de su casa, explora su propio cuerpo, da vida a las cosa inertes; en su mente un palo de escoba es un caballo que cabalga por los corredores de la casa que se convierten  en verdes praderas.
Es verdad que unas personas pueden aprender más que otras acerca de determinado tema;  esto da razón de la especialidad de las ciencias y de la diversidad de las inteligencias según Gardner; y fortalece también la singularidad de los seres humanos debido a que unos recibieron estimulación para una inteligencia y otros para otra y hay quienes  las recibieron para varias a la vez.
Lo más importante es que la persona dedique su naturaleza de ser inteligente a humanizar el mundo, humanizándose cada día más ella misma, ganando la batalla contra los males que aquejan constantemente su entorno. De poco sirven los avances científicamente, que progrese materialmente, retrocede humanamente, si pierde en el laberinto de los disvalores, la inmoralidad  y la destrucción.
“De que sirve al hombre ganar el mundo entero, si arruina su vida?  De qué sirve al ser humano tener ciencia  o conocimiento, gracias a su excelente inteligencia, si pierde la razón de su existir, si pierde el horizonte, si no sabe cuál es su destino, si no encuentra sabor a la vida, si no alcanza la sabiduría?
La inteligencia es una propiedad que surge de las interacciones colectivas que cada organización humana posibilita; estas crean las condiciones dentro de las cuales cada uno de sus miembros, desde sí  y con  los otros, decide hacerse inteligente para encajar en la organización; el será mirado como inteligente en la medida que se produzca ese encaje; es decir, si este es exitoso (Gallego B. 1999).
Desarrollar la inteligencia tiene sentido si se encamina hacia el progreso del mundo, hacia la construcción de la familia humana. Al fin y al cabo el ser humano se hace inteligente con los demás: ya se ha dicho, abordando otros tema, que el ser humano se hace humano entre humanos  y por lo tanto todo lo que tiene que ver con lo que debe lograr  se alcanza en medio de los seres humanos. Se aprende a ser inteligente en medio de los demás y se es más inteligente en la medida que se logra unión, comprensión, tolerancia, aceptación y cohesión.  
No basta pensar desde una determinada inteligencia o desde una parte de la mente, hay que pensar con todo el cerebro. El arte de vivir es un asunto de inteligencia. Ser inteligente es afrontar las dificultades con vigor y creatividad.
Ser inteligente es contribuir a la búsqueda de medicamentos y tratamientos efectivos, en vez de quejarse de las enfermedades y epidemias.
Ser inteligente es buscar el origen de los males y curarlos de raíz, en vez de estarle echando la culpa a los demás.
Ser inteligente es trabajar por la justicia social para que no haya más pobres en el mundo, en vez de excusar la injusticia permitiendo que los ricos sean casa vez más ricos.
Ser inteligente es tener convicciones, principios y propósitos claros, en vez de justificar el caos, el desgano y el “dejar hacer”.    
Ser inteligente es poner a funcionar el discernimiento para elegir lo mejor de lo mejor.
Ser inteligente es aceptar que el ser humano tiene que aprenderlo todo; no hay en el mundo un ser más desprotegido  y débil al nacer.
Mientras los peces nacen  programados para nadar, las aves para andar  volar, los felinos para cazar, la persona necesita quien le enseñe a caminar, a comer, a escribir, a pintar y gracias al poder de su mente, de su inteligencia y la interacción con los demás aprende lo que necesita para irse haciendo, irse construyendo y terminando.
Nuestra mente crece con la experiencia, con la práctica, con la comprensión del cosmos, con el ejercicio de las habilidades comunicativas: leer, escribir, hablar, escuchar; con el afinamiento de la memoria y la imaginación; con el desarrollo de las capacidades de la interpretación, argumentación, deducción y proposición, entre otras.
La tarea educativa debe centrarse en centrarse en enseñar a pensar, reflexionar, analizar y desarrollar habilidades y potencialidades que contribuyan al fortalecimiento del lenguaje. Enseñar a pensar a dudar, cuestionar, interpretar, plantear hipótesis y proponer proyectos que contribuyan a la solución de problemas.     
Enseñar a pensar es conciliar la comprensión con la aplicación, es buscar los aspectos positivos, negativos e interesantes de las cosas; es echar a volar la imaginación para soñar con el futuro, es interpretar y es también desaprender esquemas que han perdido toda validez  en el mundo de hoy.
Actividad
1.    Que acciones te permiten definir que eres inteligente?
2.   Que haces para cultivar tu inteligencia?
3.   A donde crees que te llevara tu inteligencia?
4.   “De que sirve al hombre ganar el mundo entero, si arruina su vida?  De qué sirve al ser humano tener ciencia  o conocimiento, gracias a su excelente inteligencia, si pierde la razón de su existir, si pierde el horizonte, si no sabe cuál es su destino, si no encuentra sabor a la vida, si no alcanza la sabiduría? Que te sugiere este texto, explica
5. Que ha hecho crecer tu mente y por que?